Todo lo que hay que saber sobre las cámaras de acción
La calidad de imagen
La definición
La definición indica el número de píxeles que contiene la imagen final y ha evolucionado mucho en los últimos años. La definición « Full HD » ofrece una imagen de 1920x1080 píxeles (más de 2 millones de píxeles en total) y es la referencia actual a pesar que el 4K, que multiplica por 4 el número de píxeles, se está empezando a utilizar mucho. Además, las cámaras cuentan con un modo fotografía que complementa el vídeo y puede llegar hasta los 12 millones de píxeles. Esta definición te permite tomar planos increíbles o realizar fotografías de gran formato sin perder calidad.
El número de imágenes por segundo
En el cine, el estándar histórico muestra una tasa de 24 imágenes por segundo. Para conseguir una mayor fluidez, los fabricantes de cámaras digitales han alcanzado la tasa de 30 imágenes por segundo (ips), incluso 60. La inmersión en la imagen es mucho más real y convincente. Los fabricantes también se han esforzado para que los dispositivos tengan funciones de cámara lenta. Algunos modelos permiten grabar cientos de imágenes por segundo para conseguir un rendimiento increíble, ya que cuantas más imágenes se graben, más espectacular será la cámara lenta.
Ángulo de la toma
Las cámaras de acción usan ángulos de toma muy amplios, hasta 170º, con muchos ajustes disponibles. Este campo está muy abierto y sirve para no perder ni un centímetro de la acción e incluir diferentes elementos en el encuadre, como el puesto de conducción de la bicicleta. El resultado es una inmersión más intensa y profunda en la acción. Una toma con mucho ángulo también presenta la ventaja de ofrecer una estabilización natural mucho mejor que en un plano cerrado como los que se obtienen con un teleobjetivo. Por último, se puede preparar una puesta a punto perfecta desde el primer al último plano, sin que ningún elemento quede desenfocado.
La sensibilidad
Las cámaras de acción suelen contar con sensores de pequeño tamaño, diseñados en principio para ofrecer una calidad de imagen óptima durante el día. Cuando la luz empieza a escasear, se puede aumentar la sensibilidad de forma automática o manual, para conseguir una buena exposición de la imagen.
La precisión del objetivo
La calidad de una imagen depende del sensor digital y de la calidad de la lente. Los fabricantes usan actualmente diferentes estrategias en los objetivos, así como procedimientos de mecanizado muy precisos para garantizar la mayor nitidez posible.
La compresión de los archivos
Las cámaras de acción ofrecen varias opciones en este sentido. Hay tipos de archivos más ligeros para no ocupar mucho espacio en el disco y mantener una buena calidad de imagen. Los formatos en bruto (.raw) necesitan más espacio para guardarlos, pero permiten a los cineastas, profesionales o aficionados, muchas posibilidades de edición: los colores y el contraste se pueden trabajar con precisión.
Ayudas para las grabaciones
La estabilización
Durante las sesiones en las que lleves la cámara se pueden colar muchas vibraciones en tus imágenes. Los diseñadores de las cámaras de acción se han decantado por una idea muy eficaz: la estabilización de la imagen integrada en la cámara. El resultado es una película estable, sin fallos y sin riesgo de que tus espectadores vomiten mientras ven tus peripecias.
Los modos de grabación
Vídeo normal, cámara lenta, foto, ráfaga de fotos, cuenta atrás… Las cámaras actuales tienen muchas opciones y modos de grabación.
La protección frente a los elementos
La resistencia a los golpes
Las cámaras de acción suelen incluir una carcasa de protección. Esta carcasa juega un papel de barrera mecánica frente a posibles golpes y arañazos, además de ser la encargada del sellado de la cámara. Algunas cámaras ya vienen con una carcasa montada muy resistente, por lo que sólo necesitan una funda de protección más ligera.
En un caso o en el otro, las cámaras de acción tienen la gran ventaja de ser compactas, con muy pocos componentes internos frágiles. Estos componentes se montan de forma que no se muevan. El peso mínimo de estas cámaras, junto con la protección exterior, hace que si sufren un golpe, la fuerza generada se absorba y sufran menos las consecuencias que si se tratara de un dispositivo más antiguo. Si se usan de forma normal y prudente, sin golpes fuertes o caídas de muchos metros, las cámaras garantizan una durabilidad excelente.
Impermeabilidad
Ya hay modelos en el mercado que cuentan con un certificado de resistencia al agua de hasta 10 metros de profundidad sin tener que usar una carcasa específica.
Comodidad de uso
La autonomía
Para tener más espacio y ser más eficaces, los fabricantes han trabajado mucho en las baterías específicas para estas cámaras. La autonomía depende del uso (una grabación de vídeo continua necesita mucha más energía que tomar una foto, por ejemplo), pero llegan hasta varias horas de funcionamiento.
El ajuste de los menús
Una cámara pequeña no significa opciones limitadas. Todo se puede modificar: el formato de las imágenes, el modo de toma, las opciones de colores o contraste, las señales sonoras o luminosas, etc. Se puede adaptar la cámara a tu gusto para que la uses de forma intuitiva, hasta con los ojos cerrados.
La conectividad
Si la cámara es compatible con WiFi o Bluetooth podrás compartir tus archivos con mayor facilidad. También se puede manejar la configuración y el uso a distancia, normalmente con el móvil gracias a las aplicaciones que compensan en gran medida la ausencia de una pantalla en la misma cámara, a veces incluso con un mando a distancia.
El soporte de grabación
Las cámaras actuales graban normalmente en formato .MOV o .MP4, en tarjetas SD o microSD porque se trata de archivos de gran tamaño. Las tarjetas de clase 10 son lo bastante rápidas para acometer este tipo de vídeos en Full HD o 4K. Cuanto mayor sea la velocidad de escritura indicada en la tarjeta de memoria (por ejemplo: 90 Mb/s), mayores posibilidades tendrás de grabar vídeos fluidos y completos, sin saltos de imagen ni sacudidas.
Las conexiones
La mayoría de las cámaras se pueden conectar a través de un cable USB a un ordenador para transferir las imágenes, los vídeos o recargar la batería. Si tiene una entrada de HDMI, las imágenes se pueden ver directamente en una televisión.
La pantalla
Las cámaras de acción son pequeñas y normalmente carecen de pantalla de visualización. Esto no es un contratiempo, ya que una pantalla suele consumir mucha energía, con lo que se reduce la autonomía de la batería. Una pantalla pequeña en blanco y negro es lo que suelen tener estos dispositivos para realizar los ajustes de configuración.
Por el contrario, una pantalla es especialmente recomendable si quieres usar la cámara de acción como cámara fotográfica. Algunos modelos cuentan con una pantalla táctil para que su uso sea aún más intuitivo.
Los sistemas de sujeción
Las cámaras de acción no se pueden utilizar sin los elementos de sujeción adecuados.
Sujeciones adhesivas
Estas sujeciones son fáciles de colocar, no dañan el soporte (como puede ser la pintura del casco) y ofrecen una gran resistencia. También cuentan con la ventaja de ser muy ligeras y capaces de adaptarse a las formas ligeramente curvadas.
Sujeciones con abrazadera
Para colocar la cámara sobre el manillar o el cuadro, una sujeción con abrazadera es una opción excelente. La cámara no se moverá y se puede hasta montar en un brazo articulado pequeño, para ajustar el encuadre de la imagen con precisión.
Sujeciones con clips
Si no puedes utilizar una sujeción adhesiva para colocar la cámara, las cintas con clip son una alternativa interesante. De la misma forma que se hace con un arnés, podrás colocar la cámara en el pecho y ofrecer unos puntos de vista muy interesantes.