CUBE - World

En 1993, el estudiante de la universidad de Munich y aficionado al ciclismo Marcus Pürner fundó la marca Cube, que luego se convertiría en una de las grandes de la industria de la bicicleta. Al principio, Marcus trabajaba con su amigo Michael Prell (hoy en día encargado del diseño) en una tienda de bicicletas de 30 m² en un local de la empresa de muebles de su padre en Waldershof, Baviera (Alemania). En poco tiempo, los dos jóvenes empresarios decidieron ir un paso más allá y diseñar sus propios cuadros. Desde entonces, Cube sólo ha conocido el éxito. Sus principios eran sólidos y sencillos: ofrecer modelos con una calidad inconmensurable que garanticen un rendimiento de primer nivel y una conducción muy cómoda. Cube conquistó al gran público con una gama de bicicletas muy completa. Una colección muy numerosa de bicis, con variantes de cuadros o componentes que van desde las Mountain Bike a las bicicletas de carrera, pasando por el triatlón, el ciclocross, el gravel, las bicicletas todocamino, las bicicletas de viaje y las de paseo. Sin duda, su especialidad son las bicicletas con asistencia eléctrica y los modelos con diseños específicos para mujeres y niños.

Siempre desde Waldershof, apenas a unos metros de sitios históricos, la empresa ha diseñado, probado y montado (algo muy poco común en esta industria) todas sus bicicletas de la primera a la última. Todo en una fábrica moderna de 40.000 m² en la que también trabajan en sus propias ruedas. Cerca de 500.000 bicicletas salen de esta fábrica cada año, vendidas en más de 60 países y haciendo de Cube una de las marcas más grandes del sector en cuanto a volumen de negocio.