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¿Cómo elegir un sillín para mujer?

¿Quién no ha sufrido después de una ruta por la incomodidad y el dolor? Al igual que el ajuste de la posición, escoger bien el sillín es primordial para garantizar unas salidas agradables y sin sufrimientos. Tanto si es para una disciplina urbana, para rodar en carretera o para ir por los senderos de MTB, tendrás que elegir un sillín que se adapte bien a tu anatomía. Pero, no es tan fácil encontrarlos entre tantos modelos, la mayoría para hombre. Pero, afortunadamente, hay modelos específicos para las mujeres o modelos mixtos. Aquí te damos algunos consejos para que lo tengas más claro.

Los estándares

  • El perfil: redondeado, plano, semirredondeado.
  • Canal central: sin canal, con canal hueco o hendidura.
  • Anchura y longitud
  • Material del asiento y los raíles

Tipos de sillines

Hay que recordar que no es posible asegurar que un modelo en especial es el que mejor te va. Solo para probar en varias salidas de diferente duración con diferentes ajustes te permitirán asegurarte de que ese modelo es el más indicado. Sin embargo, este suele ser la clasificación que usan tanto las usuarias como los fabricantes.

 

Se pueden clasificar los sillines para mujer en tres tipos de formas :

Redondeado

Muy valorado para las rutas de larga distancia y los ciclistas en busca de la comodidad. El peso suele estar mejor repartido y la forma evita rozaduras o incomodidades a largo plazo.

Plano

Diseñado para las rutas de corta distancia y/o esfuerzos intensos. Sin duda, una opción para las carreras en las que hay que cambiar de posición a menudo.

Semirredondeado

Para aumentar la polivalencia de los sillines, esta forma intermedia entre redonda y plana es perfecta.

 

El canal central

Para reducir las molestias en la zona perineal, algunos sillines presentan un canal en la parte central del sillín. Este canal puede tener una hendidura a para reducir la presión, o ser totalmente hueco b para suprimirla. Además, por la anatomía femenina, las mujeres suelen sufrir más la presión del cuerpo. Los roces y la presión pueden acabar transformándose en dolor.

 

Anchura y longitud

La anchura

La anchura del sillín depende de dos factores: el tamaño de la pelvis y la posición que lleves sobre la bici. En un sillín ideal, la presión tendría que ejercerse al máximo sobre los huesos de la pelvis, llamados isquiones. Tanto en carretera como en MTB, es difícil de respetar esta máxima por la posición deportiva. Por eso, tenemos que elegir un sillín específico para evitar la presión excesiva o los roces muy repetitivos.


La mujer tiene los isquiones más separados que el hombre. Los modelos de sillines que mejor se adaptan son los más anchos. En un sillín de hombre, lo más normal es que los dos isquiones acaben fuera del sillín. Todo el peso de la ciclista reposa sobre el perineo. Los sillines para mujer también son más cortos que los de hombre por la anatomía de la pelvis femenina.


La posición sobre la bici también influye en la anchura del sillín. El reparto del peso entre el sillín, el manillar y los pedales es diferente si vas a pedalear en una posición deportiva con el peso echado hacia adelante, o una posición más recta con la mayor parte del peso soportada por los isquiones.


La anchura de la pelvis marcará los puntos de apoyo de los isquiones en el sillín. La anchura del sillín varía entre 135 mm y 165 mm.



La longitud

Como hemos dicho, los sillines para mujer son más cortos que los de hombre por la forma de la pelvis femenina. Los sillines más cortos (con una longitud por debajo de los 250 mm) se utilizan cada vez más en bicicletas de carrera, Gravel o en las Mountain Bike ya que se encuentra la posición más fácilmente y tienen más espacio libre si te apoyas en la parte trasera de la bici como ocurre en los descensos más arriesgados. Además, cuando te pongas de pie sobre la bici, el sillín más corto no rozará tanto con los muslos.

 

Les sillines más largos (con una longitud superior a 250 mm) son perfectos para las rutas en las que se puede adoptar una posición más cómoda como en los triatlones o las bicicletas de competición.

 

Materiales y raíles

Los materiales


Se utilizan muchos materiales para el revestimiento. Si el plástico aporta una comodidad relativa, la espuma con efecto memoria se adapta mejor a tu anatomía. Ocurre lo mismo con los modelos de piel que toman la forma de los isquiones con el paso de los kilómetros. EL gel tiene una excelente reputación a la hora de amortiguar los golpes. De todos modos, tenemos que avisarte que no es buena idea elegir un sillín demasiado blando. Si los isquiones se hunden muy profundo en el gel, la presión afectará también los tejidos blandos sensibles. Con o sin gel, el sillín ideal no tiene que ser ni demasiado rígido ni demasiado blando.


Para terminar, no es extraño encontrar el mismo modelo de sillín con raíles de diferentes materiales. Además de las diferencias sobre el peso, el material puede ser más o menos cómodo, pero todo acaba incidiendo en el precio final del sillín.

Los raíles


El raíl de acero es cómodo, pero es el material más pesado de los propuestos.


El raíl de aluminio es menos cómodo que el acero, pero más ligero.


El raíl de titanio tiene la mejor relación entre comodidad y peso, pero tiene un coste más alto.


El raíl de carbono es el más ligero y el que tiene mejor respuesta de todos.


Recuerda: cada fabricante usa su propia denominación para las aleaciones de los materiales de los raíles (por ejemplo, TiroX, Kium...) que pueden llevar al error. Compruébalo bien antes de elegir el sillín. Y cuidado con los raíles de carbono, que suelen ser ovalados y no redondos, por lo que necesitan una tija de sillín con un carro compatible.


¿Cómo elegir el sillín perfecto?

Todo depende de la disciplina que practiques.

En una bici de paseo, la posición suele ser más alta y los puntos de contacto se centran en la parte trasera del sillín. La presión se ejerce sobre los isquiones (huesos de la pelvis). Un sillín más ancho en la parte trasera es lo más indicado en este caso.

Por el contrario, la posición en el ciclismo en carretera es más cercana a la parte delantera del sillín con el pecho sobre el manillar. Un sillín equipado con un canal central hueco y la punta inclinada hacia abajo para relajar la presión en la zona perineal.

Por último, en MTB, la posición es parecida a la de la bici de carrera, quizá algo más recta. Por esta razón, el sillín tendrá que ser algo más ancho para reducir la presión en los tejidos blandos sensibles. El sillín también tiene que ser más resistente para aguantar los golpes y vibraciones del terreno.

Si tu posición es más recta, el peso irá más repartido sobre el sillín. En ese caso, un sillín más ancho es una gran alternativa. A pesar de esto, un sillín demasiado ancho puede llegar a molestar en el movimiento de pedaleo y provocar roces en la cara interior de los muslos a largo plazo. Si tienes dolores en la zona perineal, prueba un sillín con hendidura o canal central abierto.

 
 

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