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¿Cómo elegir un bañador de hombre?

Si te vas a poner en forma, vas a entrenar con frecuencia o te vas a preparar para un triatlón con ejercicios intensos, elegir bien el bañador es fundamental. Además del aspecto, sobrio o atrevido según tu personalidad, los bañadores presentan unas características técnicas cada vez más avanzadas.

Entonces, ¿cúal es el bañador para hombre más adecuado para tu nivel y tu morfología? Aquí tienes algunos consejos para guiarte a la hora de comprar.

Puntos clave

  • Tipos de bañadores y corte.
  • Morfología

Tipos de bañadores

Hay cuatro tipos de bañadores para hombre:


Slip de baño:

Con una altura de 7 cm en los laterales, este modelo tradicional proporciona una libertad de movimientos total.

 

Slip ancho:

La versión más actualizada del slip y la más moderna es este slip ancho que permite una gran libertad de movimientos aunque cubre algo más, con una altura media de 14 cm en los laterales y le da un aspecto dinámico y deportivo.

 
 

Bóxer:

Un modelo cómodo y sin molestias para cualquier tipo de cuerpo. El bóxer es la elección ideal para los nadadores que buscan un equilibrio perfecto entre cobertura, libertad de movimientos y velocidad. La altura de los laterales suele estar entre en 27 y 30 cm.

 
 

Jammer:

Con una longitud entre 45 y 50 cm, el bañador jammer es un modelo para los nadadores más experimentados que buscan el mejor rendimiento. Su hidrodinámica es total y algunos modelos aplican cierta compresión para mejorar el funcionamiento muscular.



Morfología

Además de tu gusto personal, hay que tener siempre en cuenta que la morfología es un elemento importante para combinar la comodidad, el rendimiento y la armonía global de la silueta:

●Si eres grande y estás en forma: tienes la ventaja de poder elegir, todos los bañadores te irán bien, desde slip a jammer.

●Si eres grande y delgado: opta por los bóxers o los jammers y evita los bañadores cortos de tipo slip.

●Si eres grande y grueso: elige un modelo largo sin muchos dibujos para garantizar un buen equilibrio para tu silueta.

●Si eres pequeño y estás en forma: elige un bañador que estire tu silueta. Los slips (tradicional o ancho) y los bóxers se adaptan especialmente a este tipo de morfología. Por el contrario, aléjate de los jammers porque suelen quedar ceñidos.

●Si eres pequeño y delgado: sin duda, el bañador perfecto es el bóxer ya que dibuja una silueta excelente.

●Si eres pequeño y grueso: la mejor opción son los bañadores cortos decorados con dibujos o rayas.



Elegir un bañador según tu disciplina

No todos los bañadores valen, hay que tener algunos criterios como el nivel de intensidad, la ambición deportiva o el entorno donde entrenas o compites (lago, mar o piscina). Algunos bañadores irán como anillo al dedo y otros no tanto.

 
  • Si practicas de forma ocasional

    En este caso, un modelo cómodo ante todo con el que puedas moverte sin problemas. Lo mejor es un bañador de tejido flexible como el elastano, por ejemplo.


    Sobre el corte o la forma del bañador, depende de lo que te guste, pero como ya sabes también de tu anatomía y de las cualidades que busques.

  • Entrenas con frecuencia y eres un nadador experimentado

    Si nadas con frecuencia, una o dos veces por semana, elige un modelo resistente al cloro. No compres un bañador de elastano, este material es muy sensible al efecto del agua con cloro.

    En cuanto a la forma, un bañador que garantice una gran libertad de movimientos y poca resistencia al agua. Escoge entre el slip ancho, el slip tradicional y el bóxer (largo o corto).

  • Entrenas con frecuencia e intensidad y participas en competiciones

    Los nadadores a los que nos referimos en esta sección son los que van a entrenar al club tres veces por semana para preparar las competiciones. Para los entrenamientos, un modelo hidrodinámico con poca resistencia al agua es una buena opción. Te recomendamos un modelo grande y que seas inflexible con la comodidad ya que es fundamental para poder completar sesiones duras de trabajo y entrenamiento. Los modelos largos de poliéster se adaptan especialmente bien a este tipo de disciplina.


    Para la competición, escoge un jammer con cierta compresión que ofrezca una buena hidrodinámica y más flotabilidad. Una forma de garantizar la velocidad en el agua. Asegúrate también de que llega hasta la parte superior de la rodilla y que lo haya aceptado la FINA (Federación Internacional de Natación).

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