Los diferentes sistemas de hidratación para running (mochila, chaleco, bidón flexible, cinturón de geles)
Desde la tradicional mochila de hidratación con depósito de agua integrado a un cinturón minimalista para llevar los geles al alcance de la mano, la oferta en sistemas es amplia e incluye los chalecos, cada vez más finos y técnicos, los bidones rígidos y flexibles, y los cinturones de hidratación.
Éstas son sus ventajas:
Depósito flexible en la mochila
Son los famosos depósitos que se colocan en un compartimento interior de la mochila y están equipados con un tubo. Este sistema fue el primero que permitió una hidratación sin paradas. Estos depósitos proceden del ciclismo y tienen muchas ventajas, pero todavía no son la opción más utilizada para la carrera a pie.
Ventajas:
+ Sistema perfecto para las carreras largas o muy largas donde haya poca agua disponible.
+ El depósito queda perfectamente integrado en la mochila de gran tamaño y no molesta en carrera.
+ Muy útil para beber sin parar y no exponer el líquido a las condiciones del exterior.
+ El depósito se puede usar con otros sistemas de hidratación como los bidones.
Inconvenientes:
- Es difícil saber la cantidad de bebida que queda en el interior ya que va dentro de una mochila.
- Para rellenarlo hay que sacar el depósito y eso conlleva tiempo.
- El líquido podría llegar a enfriar tu espalda y que eso genere problemas en carrera.
- En las mochilas más pequeñas, el depósito ocupa casi todo el espacio disponible.
Chalecos de hidratación
Los chalecos destacan por su diseño compacto con un ajuste ceñido excepcional que elimina cualquier posibilidad de balanceo.
En este caso, el agua se lleva en la parte delantera en los 2 compartimentos para botellas o bidones. Algunos modelos también tienen espacio para llevar un depósito de agua. Suelen tener un bolsillo elástico en la parte trasera para que lleves lo imprescindible para salir a correr: un kit de primeros auxilios, barritas energéticas o una manta de supervivencia.
Ventajas:
+ Sistema muy compacto para garantizar una libertad de movimientos total.
+ Acceso rápido a los bidones sin tener que parar de correr.
+ El chaleco es un sistema relativamente ligero.
Inconvenientes:
- Volumen de agua menor que el de una mochila de hidratación con depósito integrado. Tendrás que parar con cierta frecuencia para recargar los bidones en las carreras de larga distancia.
Cinturón de hidratación
El cinturón de hidratación es una solución minimalista y asequible para las rutas de menos de una hora. Con su volumen reducido y un diseño ergonómico, estos cinturones son perfectos para las carreras de corta distancia. Además, podrás llevar algunas barritas de cereales y objetos personales como las llaves, la cartera o el móvil. Su diseño compacto y el relleno garantizan una comodidad increíble y una sujeción excelente en carrera. Hay modelos que pueden llegar hasta tres litros de capacidad.
Ventajas:
+ Sistema ligero, perfecto para las salidas y las rutas de corta distancia
+ Se pueden llevar 1 o 2 bidones rígidos según el modelo de cinturón.
+ A diferencia de las mochilas, el cinturón no cubre la espalda y no influye en la temperatura corporal.
+ Algunos modelos te permiten llevar más cosas como una manta de supervivencia, el móvil, unas barritas energéticas o las llaves.
+ No molesta mientras te mueves.
Inconvenientes:
- El cinturón puede balancearse un poco si la carga es muy pesada.
- Volumen de bebida limitado.
- Requiere algo más de manipulación en carrera que las botellas o los bidones que van enganchados a los tirantes de una mochila y equipados con un tubo de hidratación.
Actualmente, las botellas y bidones son la solución más habitual en el mundo del trail running. Los cinturones de hidratación, los chalecos y las mochilas de trail running están diseñados para llevarlos. Es una forma de hidratarse sin tener que parar. Suelen colocarse en los tirantes de las mochilas. Basta con girar ligeramente la parte superior para beber mientras corres. Algunos modelos tienen tubos o pajitas para que sea más fácil usarlos.
Hay 2 categorías de bidones: bidones flexibles (los más usados) y bidones rígidos. Cada uno tiene sus ventajas e inconvenientes.
Bidones flexibles
Ventajas:
+ Son muy ligeros.
+ Cuando están vacíos, se pueden doblar y apenas ocupan espacio, al contrario que los modelos rígidos.
+ Como se suelen llevar en los tirantes de la mochila, no hace falta aspirar muy fuerte para beber, basta con presionar un poco el bidón (junto con el peso mínimo, es una de las claves de este tipo de bidones).
Inconvenientes:
- Son menos resistentes que los bidones rígidos.
- Es más difícil rellenarlos si lo haces en horizontal, en un río, por ejemplo. Suelen flotar y tendrás que expulsar el aire.
- Como es lógico, también es más difícil colocarlos en la mochila cuando están llenos por su estructura flexible.
Bidones rígidos
Ventajas:
+ Muy resistentes.
+ Más fáciles de rellenar.
+ Más fáciles de guardar en la mochila.
Inconvenientes:
- Más pesados que los bidones flexibles.
- Ocupan el mismo espacio vacíos o llenos.
- Requieren un mayor esfuerzo de aspiración para beber.
Bidón de mano
Estos accesorios (casi siempre flexibles) suelen venderse por pares para poder agarrar uno u otro con la mano derecha o con la izquierda. Los bidones tienen un volumen entre 150 y 500 ml, puede que algo más. Se recomienda no crear un desequilibrio importante entre los dos brazos para que no influya en los movimientos de balanceo. Esta solución es perfecta para las carreras de 30 a 60 minutos de duración.
Ventajas:
+ Fáciles de usar.
+ Acceso rápido a la bebida.
Inconvenientes:
- Afecta inevitablemente a los movimientos de los brazos.
Tipos de sistemas y volumen para cada disciplina (recorridos cortos, largos)... ¡Cuidado con la talla!
Como ya sabes, es bastante importante mantener un buen nivel hídrico durante la actividad física. Puede perder entre medio litro y dos litros y medio de agua por hora según la intensidad del esfuerzo y las condiciones meteorológicas. Esto influye directamente en el rendimiento, y en el peor caso puede acabar en una deshidratación. Por eso, recomendamos una hidratación frecuente cada 10 o 15 minutos, con pequeños sorbos de 10 o 15 ml. No esperes a tener sed porque eso ya es una señal del principio de la deshidratación.
Si el esfuerzo físico va a durar menos de una hora, bastará con un cinturón de hidratación. Bebe en abundancia cuando vuelvas de correr para tener una buena recuperación.
Si el esfuerzo físico va a durar más de una hora, es mucho más sensato elegir un sistema que tenga más volumen de agua disponible. En los recorridos de larga distancia, recomendamos el uso de una mochila con depósito de agua o compatible con el uso de bidones flexibles. La comodidad de la mochila y la capacidad para llevar bastones son otros detalles que puedes tener en cuenta. También es muy recomendable que tenga espacio para llevar el avituallamiento y otros accesorios de carrera. La cantidad de agua necesaria depende de la distancia que haya entre los avituallamientos de la carrera.
Para los recorridos largos o las carreras "ultra trail" (por encima de los 40 km), la mejor opción es una mochila de hidratación con 10 o 20 litros con un depósito de agua con 2 o 3 litros como máximo.
Para los recorridos cortos (de 20 a 40 km), basta con una mochila de 5 litros con un depósito de agua de 1,5 litros.
