Cuadros para bicicleta – Un cuadro ligero y rígido

El cuadro es la pieza maestra de las bicicleta de carrera. A partir del cuadro es como se determina, en la gran mayoría de ocasiones, el comportamiento, el tipo de práctica y el nivel de esa bicicleta de carretera. La composición y la forma de los tubos del cuadro, así como la manera en que se disponen y unen definirán las características de la bicicleta. Actualmente existe en Bikeshop una gran variedad de geometrías y materiales para los cuadros, de modo que se cubran las numerosas disciplinas en las que se divide el ciclismo de carretera.
 

Cuadros para bicicleta – Una geometría particular

Un cuadro de carretera está formado por dos triángulos. Estos se componen por el tubo de dirección, el tubo horizontal (o tubo superior), el tubo diagonal y en medio, entre el pedalier y la tija de sillín, el tubo vertical (o tubo de sillín), que garantiza la unión entre el triángulo delantero y trasero. El triángulo trasero está compuesto por los tirantes (tubos entre la parte superior del tubo del sillín y la rueda trasera) y las vainas (del eje del pedalier a la rueda trasera). Es cada vez más común ver cuadros "sloping" (caída), caracterizados por una forma que se acerca a la de los cuadros MTB pero con el tubo superior inclinado hacia abajo cuando llega al nivel del tubo vertical.
 

Cuadros para bicicleta – Materiales cada vez más ligeros

Durante mucho tiempo se utilizó el acero, pero hoy en día los materiales utilizados para los cuadros de carretera son el titanio, el aluminio y, sobre todo, el carbono. Estos materiales redujeron considerablemente el peso y mejoraron las características de los cuadros, gracias a sus cualidades y a su gran maleabilidad, que ha permitido a los fabricantes darle forma a los tubos para que sean más cómodos, más rígidos y con más nervio. Con el paso del tiempo, la gran apuesta de los fabricantes es conseguir fabricar los cuadros más aerodinámicos, cuyos resultados puedes ver en Bikeshop.