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CARRETERA - Bicicletas

Mejorar tu bicicleta de carrera

¿Quieres rejuvenecer tu bici de carrera y darle un aspecto más moderno y avanzado sin cambiar el cuadro? ¿O prefieres poner a punto la bici para conseguir mejores prestaciones, más comodidad y mayor fiabilidad en el montaje? Aquí tienes algunas ideas para mejorar tu bicicleta de carrera.

Las modificaciones que podemos hacer dependen de los siguientes elementos:

  • El modelo de bicicleta que tengas.
  • La disciplina que practicas.
  • La frecuencia de uso.
  • Tu estilo de pilotaje.
 
 

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Revisar el cableado interior y ponerlo a punto para tu disciplina, ya sean los cables de freno o de cambio, hará que las rutas sean más cómodas y agradables. Aunque no cambies el cuadro, el interior del mismo se refuerza con el cambio de cables y fundas.

El cambio habitual de los rodamientos de pedalier, o de las ruedas, reduce el roce y mejora la transferencia de potencia para optimizar el rendimiento y tener mejores sensaciones en plena actividad física.

 

Además, puede que quieras cambiar de plato para alcanzar un desarrollo más acertado para la disciplina que practicas o sólo por mejorar el rendimiento y ahorrar algunos gramos de peso. Si te suena bien, puede probar con los platos ovalados que tan de moda puso en su día el equipo Sky de Chris Froome y Bradley Wiggins, hoy Ineos. Prueba la eficacia de tu golpe de pedal con este tipo de montaje.

 

Cambiar de cassette te permite abarcar un desarrollo más amplio, sobre todo en los recorridos más difíciles con relieve, puertos y desniveles de vértigo en los que te moverás con más soltura.

 

Para personalizar la bicicleta, nada mejor que jugar con las opciones para la cinta de manillar o los puños. La meta siempre es la misma, cuidar hasta el mínimo detalle, salir de lo habitual, marcar la diferencia en medio del pelotón con colores vivos y elegantes y garantizar la comodidad al manillar.

No podemos olvidar los portabidones, que le dan un toque personal a la bici con su diseño y aligeran el peso total con su estructura.

El sillín es el elemento más importante para garantizar la comodidad del o la piloto. Si tienes un sillín usado, no esperes para cambiarlo y hacerte con uno que se adapte a tu morfología y mejore la comodidad en las rutas de larga distancia. También puede ser un medio para ahorrar peso en el montaje completo de la bicicleta.

Si lo que buscas es el mejor rendimiento, la compra de un par de cubiertas es un modo excelente de optimizar tu esfuerzo físico. Como ya sabes, la cubierta puede ser un poco más ligera y presentar una respuesta excelente, especialmente en los cambios de ritmo y los sprints, pero aquí nos centraremos en el rendimiento. Una cubierta de alta gama con múltiples tecnologías puede ayudarte a ahorrar unos vatios de gran valor al final del recorrido.

También es una opción interesante invertir en una cubierta de competición para las carreras y otros eventos especiales, igual que es muy recomendable tener una cubierta más resistente a los pinchazos para salir a entrenar. Además, te ahorrarás también una suma importante en cámaras de aire.

Aunque nunca te hayan gustado mucho los pedales automáticos, tienes que saber que puede ser lo primero en lo que gastes el dinero para mejorar tu ciclo de pedaleo y aumentar su eficacia. De hecho, si también usas calas automáticas tirarás mejor del pie, subiendo el tobillo y con un golpe de pedal más redondo, lo que se traduce en una mejor transferencia de potencia.

Recuerda, rodar con pedales o calas usadas puede dar lugar a lesiones o a un pedaleo viciado, con poca técnica.

A veces, basta con un buen lavado para darle una segunda juventud a tu bici y garantizar una mayor comodidad en tu próxima ruta. Limpiar el cassette, desengrasar la cadena o frotar las roldanas sirve para que la bici se maneje mejor, con más facilidad y una rotación correcta del sistema de transmisión.

También puedes hacer algunos ajustes en la transmisión: sustituir el cambio trasero, montar un pedalier nuevo o mandos de cambio a estrenar para ahorrar peso, mejorar el funcionamiento y aumentar la resistencia al desgaste.

  
 
 
 
  
  

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Invertir en un GPS te permite medir en números tus sensaciones sobre la bici. Un dispositivo útil mientras pedaleas para saber tu estado de forma dentro del plan de entrenamiento, saber el número de kilómetros que has recorrido, conocer la velocidad o ver el itinerario que has seguido y seguir tu rastro para no perderte.

 

Si funciona con aplicaciones como Strava o Garmin Connect, puedes enviar todos los datos para analizar tu actividad física y el entrenamiento. Aunque no seas apasionado de la competición, tener el respaldo de los números es un excelente modo de medir tu progresión y motivarte.

 

Además, la adquisición de un manillar nuevo mejora tu posición de pilotaje. Más grande, con más elevación para aumentar la comodidad, o más estrecho y bajo para mejorar la aerodinámica. El puesto de conducción se puede personalizar según lo que necesites o por la intensidad de la disciplina que practiques.

 
  
 
 
  
  

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La elección del par de ruedas depende de la disciplina que practiques y del perfil que busques. Peso, altura de la llanta, anchura de la llanta... hay muchas características que entran en juego para configurar el montaje y adaptarlo al recorrido que sueles realizar. Si vas a invertir en unas ruedas de alta gama, puedes guardarlas para las competiciones o los eventos especiales.

 

El medidor de potencia es el elemento imprescindible para las personas que compiten. Una forma de invertir en tu propio entrenamiento y conocer en detalle los datos recogidos durante la ruta o salida. Fiable y preciso, el sensor no tiene en cuenta elementos externos como el viento o la lluvia. El medidor cuantifica el entrenamiento y el cansancio para realizar un seguimiento exhaustivo del rendimiento deportivo. Puedes compararte contigo mismo, intentar mejorar tus propios récords y seguir tu progresión.

 

También se puede mejorar el sistema de freno. La mejora del sistema de freno implica una respuesta superior y una mayor confianza a los mandos. Un montaje de alta gama aumenta la potencia de freno, la comodidad, la respuesta y el agarre al optar por un tamaño diferente o por otro tipo de discos.

 

Los frenos de disco son los más utilizados actualmente en el pelotón profesional. En las carreteras mojadas, estos frenos pueden ser algo más cómodos, con más seguridad y una confianza mayor ante los posibles peligros que te encuentras en la ciudad. Sin embargo, hay que recordar que este sistema añade un poco más de peso a la bici.

 
  
 
 
  
  

Cuidado de los detalles, los ajustes y el mantenimiento

  

Los motivos para mejorar la bicicleta de carrera pueden ser muchos. Algunos corredores buscan el rendimiento en primer lugar, para sacar el máximo partido de su esfuerzo físico. Otros prefieren la comodidad para garantizar que sus rutas siempre sean agradables.

 

También se da el caso de que la mejora de la bici sólo tenga como objetivo personalizarla para destacar entre el pelotón y darle un aspecto único. Todos los componentes como el manillar, la potencia, los puños, los pedales, la abrazadera para sillín, la dirección, la tija de sillín y el sillín se pueden cambiar para darle más color a tu bicicleta.

 

También están disponibles miles de piezas sueltas de colores diferentes, como las roldanas de cambio, los tornillos, los discos, las fundas, los latiguillos... Hasta las piezas de carbono o los rodamientos cerámicos reducen el peso total o aumentan la fluidez del sistema.

A pesar de todos los componentes que se pueden modificar o mejorar, una bici bien ajustada y con el mantenimiento a punto es imprescindible y obligatoria si quieres disfrutar al máximo sobre los pedales.

  
 
  

 
 
  
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